Una de las festividades que distinguen a la Navidad es la conmemoración de la visita en la que unos magos de Oriente llegaron a Belén para presentar sus honores al niño Jesús. Esta conmemoración ocurre entre la noche del 5 y la mañana del 6 de enero. La tradición católica romana cuenta que eran tres, que eran soberanos de otras tierras e incluso les asignó nombres. En otros ritos católicos, como el armenio, los magos son doce reyes.
¿Pero qué dice la doctrina de la iglesia SUD sobre los magos?
Podemos encontrar lo que la revelación moderna aporta sobre los Magos de Oriente consultando el Bible Dictionary que aparece en la edición SUD de la versión del Rey Santiago (o Jacobo, es lo mismo) de la Holy Bible:
Llamados “sabios” (Mateo 2:1), su identificación no se da a conocer en las Escrituras, pero es cierto que fueron hombres justos enviados por llamamiento para dar testimonio de la llegada del Hijo de Dios a la tierra. Su capacidad espiritual es evidente: vieron la estrella, reconocieron su significado, trajeron regalos al niño pequeño y fueron advertidos por Dios en un sueño que regresaran a su hogar por una ruta segura. Su conocimiento fue preciso y exacto. Parece probable que fueran representantes de una rama del pueblo del Señor de algún lugar al este de Palestina, que habían venido, guiados por el Espíritu, para contemplar al Hijo de Dios y que regresaron a su pueblo para dar testimonio de que el rey Emanuel había nacido en la carne. No se nos dice cuántos hombres sabios hubo, aunque la tradición generalmente habla de tres, debido a las tres ofrendas: oro, mirra e incienso. Lo cierto es que, si iban en calidad de testigos, habría habido necesariamente dos o tres, como mínimo.
Mateo 2:1-12 establece que los hombres sabios (cuántos no se registran), guiados por una nueva estrella, vinieron a Belén a adorar a Jesús en algún momento después de su nacimiento. Quiénes son estos hombres no se nos dice, pero es cierto que no eran hombres comunes. Que tuvieron el privilegio de buscar al Hijo de Dios y darle regalos y que eran espiritualmente sensibles y conocedores sugiere que en realidad eran profetas cumpliendo asignaciones divinas. La identificación habitual de ellos como astrólogos es una tergiversación total. Evidentemente, eran hombres santos de una tierra al este de Palestina.
En este sentido también se expresa la entrada sobre los Magos que el élder Bruce R. McKonkie les dedica en su Doctrina Mormona:
En la antigua Media y Persia se daba el nombre de magos a una casta u orden sacerdotal. Su religión se centraba en la observación de las estrellas y en la astrología; adoraban el fuego, estaban llenos de tabúes y sortilegios y eran versados en la magia. La palabra magia en si, se usaba originalmente para designar el ritual y aprendizaje practicados por los Magos Persas.
El relato de Mateo sobre los “hombres sabios del oriente” que vinieron de Jerusalén en busca del Niño Jesús es a veces citado como una visita por tres Magos. (Mateo 2) En realidad no hay una base histórica para la leyenda de que pertenecían al culto persa apóstata o de que eran tres. Es mucho mas probable que hayan sido hombres devotos que sabían sobre el advenimiento de nuestro Señor e incluso de la promesa que habría una nueva estrella y que vinieron como lo hubieran hecho profetas de cualquier época, a adorar a su Rey. Esta claro que estaban a tono con el Señor y habían recibido revelación pues fueron “avisados por revelación en sueños que no volviesen a Herodes” (Mateo 2:12).
Ahora, hablando de las festividades, ¿cómo se celebra en tu país el día de los Reyes Magos?
